El ministro de Gobierno, Carlo Eduardo del Castillo, presentó la noche de este miércoles al ahora excomandante del Ejército, el general Juan José Zúñiga, quien estuvo al frente de la acción militar centrada en plaza Murillo en horas de la tarde y que fue tildada por el Gobierno nacional como una ‘intentona golpista’.
“El objetivo del señor Zúñiga era tomar las riendas de este país y establecer un régimen de facto (…) Zúñiga quería tomar el mando de nuestro país vulnerando la Constitución Política del Estado”, apuntó el ministro. “Los heridos demuestran que esto no fue un simulacro”, agregó.
El ministro explicó que, además del excomandante del Ejército, también hay otra persona aprehendida: el vicealmirante Juan Arnez Salvador, excomandante general de las Fuerzas Armadas (FFAA), siendo el objetivo principal era “derrocar” al presidente Luis Arce e “interrumpir la democracia” haciendo uso de la violencia y la incitación.
El ministro explicó que estas dos personas estaban a bordo del vehículo blindado que tumbó la puerta del Palacio Quemado, pero su “aventura golpista” quedó a medias en su intento de interrumpir el orden constitucional.
”El golpe de Estado no ha logrado consumarse”, dijo el ministro, sino una serie de delitos que deben ser investigados por el Ministerio Público y advirtió que hay un manejo político, en un contexto en el que ya se habían resuelto las movilizaciones que estaban anunciadas a partir de este jueves por parte de diferentes sectores.
La autoridad remarcó que a Zúñiga y a Arnez se los acusará de alzamiento armado, atentados en contra del presidente, destrucción de bienes público y otra serie de delitos que se especificarán tras una lectura exhaustiva del Código Penal boliviano.
Del Castillo sostuvo que se va a batallar y litigar para garantizar que no se vuelvan a repetir estos hechos que merecen una sentencia por la seducción de tropas, el alzamiento armado y atentar contra la vida del presidente y el vicepresidente.
“Ellos no merecen volver a ser llamados militares y no van a recuperar su libertad en un tiempo menor de lo que establece la Ley”, manifestó el ministro, al advertir que estos dos sujetos no actuaron solos, sino que se investigará para llegar al fondo del asunto.
Según Del Castillo, los comandantes de las FFAA se encontraban al interior de un vehículo blindado, generando terror en la población e hicieron uso de armas de fuego en contra de la vida de la población, teniendo un saldo de nueve heridos, entre los que hay un joven de 16 años que fue “brutalmente golpeado”.
“Este delincuente tuvo la osadía de usar armas de fuego en contra del pueblo boliviano”, sostuvo el ministro al hacer alusión de las declaraciones de Zúñiga, quien refirió que se iba a tomar la Casa Grande del Pueblo, de acuerdo con el reporte.
El viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, fue el encargado de ejecutar la aprehensión contra Zúñiga, quien fue derivado a celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc).
Según el ministro de Justicia, Iván Lima, la Procuraduría General y la Fiscalía General han iniciado el proceso penal y lo llevarán hasta lograr la condena del excomandante, a quien acusó de mentir y buscar justificarse en una decisión que es suya y sobre la que rendirá cuentas a la justicia.