Los líderes políticos de oposición Carlos Mesa y Luis Fernando Camacho cuestionaron este miércoles, por separado, las preguntas del referéndum planteadas oficialmente por el presidente Luis Arce ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
El jefe de Comunidad Ciudadana (CC) consideró que la consulta no solo viola la Constitución Política del Estado, sino que es un «gran engaño» porque postergaría por cinco años la aplicación de los resultados del Censo de Población y Vivienda y de la decisión del referéndum del 21 de febrero de 2026.
Al aceptar la consulta, Mesa dijo que el mandatario se niega a cumplir, con la «urgencia debida, la indeclinable responsabilidad que le corresponde de enfrentar la falta de dólares, el contrabando y el desabastecimiento de carburantes».
Mientras que el gobernador cruceño consideró que el referendo convocado es una «medida política desesperada para ocultar su irresponsabilidad ante la crisis» que atraviesa el país.
«Nuestra economía se está hundiendo y en lugar de tomar medidas correctivas que tengan el efecto de parar la subida del precio de los alimentos, el presidente propone un referendo que costará cerca de 180 millones de bolivianos. Un despilfarro más típico del masismo», sostuvo.
Según Camacho, las preguntas que envió Arce al TSE son sobre temas que «no necesitan un referendo para aplicarse».
«La limitación a la reelección ya la definió el pueblo boliviano el 21F de 2016. Seguir insistiendo con un nuevo referendo sobre este tema es pisotear nuevamente el voto de los bolivianos. Llevar esta pregunta a referendo es intentar inmiscuir a todo el pueblo en un conflicto político interno del masismo», explicó.
Sobre la subvención de combustibles, dijo que es un tema técnico y económico que le corresponde definirlo al presidente, mientras que los resultados del Censo deben aplicarse en la redistribución de escaños y en un nuevo pacto fiscal «para que todas las regiones reciban más recursos».
«Este referendo es un invento de Luis Arce para generar más controversias y debates políticos innecesarios», añadió Camacho a tiempo de asegurar que el mandatario no puede convocar por decreto a un referendo ya que vulnera la Constitución.